Doña Elvira Amado Bautista y María Isabel Hernández Clemente, como la mayoría de las habitantes de la Meseta Purépecha, cocinan en condiciones no muy favorables para su salud y para el medio ambiente, por la constante generación de humo, resultado de la utilización de leña.
Doña Elvira Amado aseguró que la falta de recursos económicos hace imposible que muchas familias adquieran una estufa que usa gas, sobre todo por el gasto que representa el surtir periódicamente el combustible, por ello, siguen elaborando sus alimentos en fogones tradicionales.
Ahora con la oportunidad que Ricardo Luna García, secretario de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial les brinda a través de la entrega de estufas ecológicas por parte de la dependencia, se dijeron contentas de ser beneficiadas por el Gobierno del Estado.
“El gas es muy caro, por eso algunas familias no acostumbran tener estufas que usan el gas, pero ya con estas estufas ecológicas podremos mejorar, agradezco al secretario el apoyo porque nos ha ayudado para que no nos enfermemos tanto y a la vez dejemos de contaminar el medio ambiente con tanto humo”, comentó la señora Elvira Amado.
Al igual que ellas, otras 38 mujeres de la comunidad indígena de San Lorenzo, en el municipio de Uruapan, recibieron una estufa ecológica que ayudará no solo a mejorar las condiciones en las cuales cocinan, también abonará a disminuir la emisión de gases contaminantes hacia la atmósfera y para que ellas mismas no respiren tanto humo que con el paso de los años se convierte en una posible enfermedad pulmonar o respiratoria que afecta la salud, comentó el secretario de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial.
Ricardo Luna García afirmó durante la entrega que para el gobierno estatal es muy grato ayudar a mejorar la calidad de vida de los michoacanos por medio de herramientas que no dañan el medio ambiente, una de las políticas centrales de la administración del gobernador Silvano Aureoles Conejo. “Cuando uno entra a las cocinas donde hay fogones tradicionales se puede apreciar todo el hollín que se genera, el cual se queda pegado en las paredes, en las tablas, en la parte del techo, ese mismo hollín lamentablemente se queda en sus pulmones.
En el mundo todavía hay 47 millones de personas que utilizan los fogones tradicionales y miren lamentablemente mueren 4 millones de personas, principalmente mujeres y niños, por eso en la Semaccdet hemos estado distribuyendo este tipo de ecotecnias, ya las hemos instalado en Charapan, otras en Angahuan y seguiremos en otras comunidades de la Meseta Purépecha”.